Hola amigos/as de El Terror Tiene Forma, hoy le abrimos las puertas de esta web al escritor Javier Sachez y a su más reciente criatura literaria titulada ‘El quinto punto cardinal’, novela ganadora del premio Juan José Plans.
Esta novela corta podría clasificarse dentro del género de suspense más que de terror, apuesta por una atmósfera gótica e insinuante antes que por mostrar la cara más visceral del género, y recurre a las siempre efectivas relaciones padres / hijos para estructurar en torno a ellas una historia de tono intimista, donde lo sobrenatural (en forma de amigo imaginario) se abre paso en el entorno y la cotidianidad del núcleo familiar. Creo detectar a lo largo de la novela algún guiño a H.P. Lovecraft, también a Ramsey Campbell (sobre todo en la lenta construcción de los elementos perturbadores) y más que alguna referencia a muchas películas de terror donde los niños y sus traumas, las posesiones y los fantasmas son los protagonistas absolutos de la función. Antes de pasar a un análisis más completo es conveniente situarnos en el argumento que nos presentan:
Esta novela corta podría clasificarse dentro del género de suspense más que de terror, apuesta por una atmósfera gótica e insinuante antes que por mostrar la cara más visceral del género, y recurre a las siempre efectivas relaciones padres / hijos para estructurar en torno a ellas una historia de tono intimista, donde lo sobrenatural (en forma de amigo imaginario) se abre paso en el entorno y la cotidianidad del núcleo familiar. Creo detectar a lo largo de la novela algún guiño a H.P. Lovecraft, también a Ramsey Campbell (sobre todo en la lenta construcción de los elementos perturbadores) y más que alguna referencia a muchas películas de terror donde los niños y sus traumas, las posesiones y los fantasmas son los protagonistas absolutos de la función. Antes de pasar a un análisis más completo es conveniente situarnos en el argumento que nos presentan:
Cuando la soledad y el entorno hostil corroen a una niña de ocho años, ésta busca una realidad paralela, un mundo al margen de los cuatro puntos cardinales. En esa íntima realidad hallará todo lo que necesita: respuestas increíbles, impalpables sensaciones, animales etéreos y una brutal amiga, invisible e imaginada, que quizás no lo sea. Es un submundo en el que ella es ella misma. Es una zona no permitida a los extraños. Es el quinto punto cardinal.
Como he comentado unas líneas más arriba la lenta inclusión de elementos inquietantes a lo largo del relato es una de las mejores bazas de la obra: la extraña niña con problemas que desarrolla una amiga imaginaria, su padre completamente sobrepasado por la situación, una casa (de precio sospechosamente asequible) en medio de un remoto pueblo montañés, unos lugareños huraños con extrañas costumbres, un pozo oscuro, un armario que se abre cuando quiere…, todos y cada uno de esos elementos van tejiendo una tela de araña que el autor dosifica con cautela, casi con timidez, logrando una densa e inquietante atmósfera que atrapa plenamente al lector obligándolo a pasar página tras página hasta llegar a la conclusión. Javier Sachez domina a la perfección ese tempo narrativo, gracias a una prosa elegante (muy descriptiva) con algunos pasajes realmente poderosos, que llevan la historia, historia muy asimilada y reconocible para los aficionados al género, un paso más allá de lo habitual, creando en muchas ocasiones una perfecta mezcla entre belleza, sensibilidad y suspense que engrandece notablemente el resultado final; sin embargo, y aquí vienen los peros, ‘El quinto punto cardinal’ no es una novela con un lenguaje fácil apto para todos los públicos, está cargada de adjetivos y largas descripciones que en algunos momentos dificultan la continuidad de la acción, lastrando la notable atmosfera conseguida y dando la impresión de que el autor en algunos momentos anda un poco perdido; también se detecta que muchas de las subtramas y personajes secundarios quedan olvidados / relegados a la imaginación del lector, dando la impresión de que Javier no ha podido (o querido) hilvanar todo lo expuesto en el relato, dado que esos elementos tenían como función servir como distorsionadores y complementos de la historia central quedan completamente desdibujados dentro del global de la obra, esta situación se hace patente sobre todo en la parte final de la novela, donde se produce un acelerón brutal para llegar a la conclusión del relato, conclusión, a mi gusto, muy precipitada.
De todas maneras 'El quinto punto cardinal' funciona bien, te arrastra a su interior aunque no se desarrolle una especial empatía con los personajes, está cargada con buenas ideas e intenciones convirtiéndose, si te dejas llevar, en una lectura agradecida llena de momentos brillantes, por lo que sus flaquezas pasan muy desapercibidas.
Por mi parte no dudo en recomendarla, una buena lectura para este caluroso verano.
Por si os interesa os dejo un link donde podéis adquirirlo: El quinto punto cardinal
Saludos y hasta mañana.
De todas maneras 'El quinto punto cardinal' funciona bien, te arrastra a su interior aunque no se desarrolle una especial empatía con los personajes, está cargada con buenas ideas e intenciones convirtiéndose, si te dejas llevar, en una lectura agradecida llena de momentos brillantes, por lo que sus flaquezas pasan muy desapercibidas.
Por mi parte no dudo en recomendarla, una buena lectura para este caluroso verano.
Por si os interesa os dejo un link donde podéis adquirirlo: El quinto punto cardinal
Saludos y hasta mañana.
